Durante más tres décadas en España se ha generado un valioso conocimiento científico obtenido del seguimiento de especies, para evaluar el riesgo de extinción según los estándares de categorías y criterios establecidos por la UICN. Como resultados, se publicaron documentos y atlas monográficos o ‘libros rojos’, y listados de todas las especies evaluadas o ‘listas rojas’ de ámbito nacional o autonómico, e incluso portales de consulta abierta tanto sobre la Flora vascular (https://listaroja.conservacionvegetal.org/ ), como y no vascular (ABRA - https://www.uv.es/abraesp/ABrA/Inicio.html) que recopilan las evaluaciones. Aún queda mucho trabajo por hacer, en particular en los grupos de la Funga: hongos y hongos liquenizados, grupos en los que ya se está empezando a avanzar en su conservación y el desarrollo de documentos equivalentes. Sin embargo, y a pesar de disponer de la información científica experta, respaldada por sociedades botánicas, la mayoría de las especies evaluadas no fueron incluidas en la Lista Roja de la UICN. Con estos antecedentes, a instancias de la propia UICN, se ha organizado en España el Grupo Nacional de Especialistas de la Comisión de Supervivencia de Especies (GNEE-CSE) de la UICN, cuyo objetivo es dinamizar una Lista Roja Nacional (NRL - https://www.nationalredlist.org/) ayudando en el proceso de incorporación de datos a UICN, resolviendo problemas que surgen en la evaluación de taxones de grupos no estándares, como sucede con hongos y líquenes o los briófitos, y en menor medida, algunas plantas vasculares cuya casuística particular no se alinea fácilmente con los conceptos, umbrales y requerimientos del proceso de evaluación. Para acompasar los procesos domésticos y subsanar debilidades e inconsistencias en la evaluación, este grupo de trabajo da soporte y asesora a aquellos grupos de expertos interesados en incorporar evaluaciones a UICN y tiene como objetivos generales subsanar las dificultades o debilidades del procedimiento y ayudar resolver problemas. En este simposio, además de presentar el GNEE, queremos escuchar a expertos de grupos taxonómicos sobre las problemáticas concretas que han encontrado para evaluar el riesgo de extinción de especies de esos algas, briófitos, plantas vasculares, hongos, líquenes, o las dificultades en contextos geográficos complejos, como pueden ser las islas y discutir posibles soluciones. Además, se quiere plasmar la ventaja que ofrece la colaboración eficiente entre redes formadas no solo por científicos expertos y organizaciones especializadas, también gestores o incluso técnicos y legisladores con interés en la conservación de especies, pues los objetivos de todos los implicados en la planificación de acciones de y conservación protección debieran estar alineados.